Deterioro cognitivo

El envejecimiento puede producir cambios en el cerebro que modifican las funciones cognitivas. La memoria, la atención, el aprendizaje, la toma de decisiones y el lenguaje suelen ser las más afectadas por la edad. Si bien no siempre se trata de afecciones significativas, existen casos en los que el deterioro cognitivo es mayor de lo esperable para la edad y el nivel educativo de la persona.

Envejecer es parte del ciclo de la vida y no hay que alarmarse ante las primeras señales de envejecimiento. Para saber si una persona mayor sufre deterioro cognitivo, prestá atención a su comportamiento para identificar los síntomas y consultar a un/a profesional en caso de ser necesario.

Para identificar los síntomas y saber cuándo es hora de realizar una consulta con un médico de confianza, es importante diferenciar cuando se trata de envejecimiento y cuando de deterioro cognitivo.

Envejecimiento saludable

• No ser capaz de recordar detalles de un evento o una conversación que sucedió hace un año.

• No ser capaz de recordar el nombre de una persona conocida pero con quien no se está en contacto cotidiano.

• Olvidar cosas y eventos ocasionalmente.

• Tener dificultades para encontrar la palabra adecuada muy de vez en cuando.

• Estar preocupado por los cambios cognitivos cuando las personas cercanas no lo están.

Envejecimiento con deterioro cognitivo

• No ser capaz de recordar detalles de un evento o conversación reciente.

• No ser capaz de recordar el nombre de un amigo o familiar muy cercano.

• Olvidar cosas y eventos muy frecuentemente.

• Tener dificultades para encontrar las palabras o reemplazarlas por otras, con complicaciones para terminar la oración muy frecuentemente.

• Las personas cercanas están preocupadas por los cambios cognitivos pero uno no lo está.

Los consejos que encontrarás a continuación pueden resultarte útiles a la hora de acompañar a un ser querido que atraviesa esta enfermedad.

#1 | Acompañar en el diagnóstico

Cuando la persona realiza una consulta médica, es común que el especialista también necesite entrevistar a un familiar o persona cercana. Esto ayuda a obtener información sobre síntomas que el paciente puede no percibir.

#2 | Ser empático y evitar juzgar

Las personas que se enfrentan al deterioro de sus capacidades cognitivas pueden sentirse frustradas y desanimadas. Por eso es importante que, como familiar o persona allegada, seas comprensivo y paciente.

#3 | Crear un entorno seguro

Los profesionales recomiendan:

• Mantener la integración social y el vínculo afectivo con la persona afectada.

• Evitar discusiones y practicar la escucha activa como método de contención.

• No señalar como errores los episodios de olvido o pérdida de memoria de la persona mayor.

• Compartir actividades recreativas con ella.

#4 | Integrar nuevos hábitos a la rutina

Cuando una persona recibe el diagnóstico de deterioro cognitivo tiene nuevas necesidades y hábitos que pueden generar frustración en ella y en quienes forman parte de su círculo cercano.

Ayudá a la persona a incorporar estos hábitos:

• Implementar etiquetas para reconocer llaves y frascos.

• Reorganizar los muebles y elementos del hogar para evitar confusiones y caídas.

• Administrar su medicación y alimentos.

• Mantener la higiene personal y la de su hogar.